Empresas
6/10/2022
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6 tips para mejorar la salud mental de tu equipo

¿Sabías que un 80 % de los trabajadores europeos padecen de estrés, y que menos del 30 % de las empresas europeas cuentan con medidas preventivas para combatir esta problemática? ¿Eres consciente de que las bajas laborales por salud mental aumentaron en un 30,9 % en los seis últimos años en menores de 35 años? Según la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud, esta es la realidad en la que vivimos en pleno siglo XXI.

Independientemente de los avances tecnológicos y científicos, esta verdad es constante: descuidar nuestra salud mental nos provoca un malestar interno. Si nos quedamos de brazos cruzados y no hacemos nada para remediarlo, este malestar invadiría nuestra vida, impidiendo que podamos afrontar los desafíos y obstáculos de nuestro diario vivir, como son, por ejemplo, los retos implícitos que asumimos al incorporarnos en el mercado laboral.

Un antídoto que propone la Organización Mundial de la Salud (OMS) para remediar esta afección es demandar que las empresas procuren velar por la salud mental, física y social de sus empleados. Después de todo, se cosecha lo que se siembra y, para poder ser una empresa saludable, primero debemos propiciar la buena salud mental de nuestros trabajadores.  

Con ese fin, facilitamos las siguientes estrategias que nos ayudarán a favorecer el bienestar psicológico de nuestros equipos:

· Ejercer un liderazgo saludable donde la seguridad psicológica esté presente. De nada servirán medidas muy frecuentes como poner dietas saludables si luego las relaciones entre la dirección y los empleados o entre ellos mismos son tóxicas. Es el punto más importante y decisivo de todos. Se sabe que estos dos factores relación con jefe y con compañeros son la causa principal de abandono de la empresa, de la desafección del trabajo y de un clima laboral deficitario. Los nuevos líderes tienen que aprender a fomentar relaciones abiertas, positivas y seguras que favorezcan la flexibilidad para responder a los desafiantes retos de la actualidad.

· Crear un ambiente estimulante y potenciador. Una flor no prosperará en condiciones adversas de poca luz y escasa agua. Así mismo, nuestros equipos no triunfarán si las condiciones laborales no son las apropiadas. Para alcanzar este propósito, podemos implementar cambios tan sencillos como cerciorarnos de que los muebles de la oficina sean cómodos y ergonómicos, que el espacio físico en sí sea amplio, esté climatizado, y que posea una buena iluminación y aislamiento de ruido. En caso del teletrabajo, le proporcionaríamos el equipo adecuado y las herramientas necesarias para que nuestros empleados desempeñen su trabajo correctamente. De manera más ambiciosa, podríamos incorporar espacios verdes y de relajación, que promuevan un sentimiento de calma y tranquilidad en la oficina. De nada servirá tomar un descanso en un espacio caótico y abarrotado, en donde nos sea imposible escuchar hasta nuestros pensamientos. Al potenciar y perfeccionar el espacio laboral de nuestros equipos, donde sea que se encuentren, llevaremos ventaja y empezaremos nuestras jornadas con buen pie.  

· Promover la comunicación efectiva. ¿Recuerdas el juego del teléfono escacharrado? ¿Aquel que busca transmitir un mensaje a través de la repetición y reinterpretación de los participantes, que van relevando el mensaje desde el primer integrante de la fila hasta el último? Si algo nos ha enseñado este juego es que si la comunicación no es efectiva, el mensaje final puede distorsionarse hasta ser totalmente distinto al inicial. La distorsión de la información puede tener consecuencias catastróficas para la empresa, ya que reduce la productividad, aumenta la conflictividad laboral y provoca una sensación de incertidumbre e inquietud. La comunicación entre una empresa saludable y su equipo debe ser constante y frecuente, clara y concisa, directa y bidireccional. Esto puede ponerse en práctica de distintas maneras: desde reuniones ¨one-to-one¨ que esencialmente son encuentros breves de retroalimentación entre un empleado y su supervisor, hasta reuniones a gran escala en donde se realicen actividades que busquen mejorar el clima laboral; a través de la implementación de un buzón de sugerencias y por medio de la aplicación de encuestas de satisfacción hasta la elaboración de un manual corporativo que detalle los protocolos y las normas a cumplimentar. Lo más importante es que se promueva una comunicación basada en la transparencia y la confianza.  

· Delimitar lo personal de lo laboral. ¿Qué es lo primero que nos pide hacer un técnico cuando uno de nuestros dispositivos presenta un fallo tecnológico? ¨Desconecta, espera y vuelve a conectar¨. Igual como tenemos que desconectar el router del internet cada cierto tiempo para que vuelva a funcionar correctamente, nosotros también necesitamos desconectar para poder volver a la carga con energía. A pesar de que la desconexión digital del trabajo es imperativa, sigue siendo un reto para las empresas y los empleados respetar este derecho y principio. Los avances tecnológicos nos han generado la sensación de que estamos conectados en todo momento y por ende, que debemos responder a los mensajes, llamadas, correos y chats inmediatamente. Todo tiene su momento y su lugar. Si no delimitamos correctamente lo laboral de lo personal, no habrá conciliación, la atención y la motivación disminuirán y se reducirá la productividad. Podemos alcanzar esta meta a través del control horario, para cerciorarnos de que no haya exceso de jornada y de que se respeten los descansos, organizando eficientemente el tiempo a lo largo del día y sobre todo: ¡queda prohibido enviar correos o mensajes tras finalizar la jornada! El tiempo es lo más valioso que tenemos: debemos respetar el nuestro y el de los demás.

· Proporcionar servicios de salud mental. Una persona que padece diabetes necesita insulina y una persona alérgica debe tener a mano antihistamínicos. De igual forma, nuestra salud mental necesita su propia dosis de medicina. En la actualidad, existe un gran interés por los beneficios laborales no económicos que favorecen el bienestar general de nuestros equipos. Incorporar un ¨salario emocional¨ puede reducir el estrés laboral, aumentar el compromiso laboral y enriquecer la calidad de vida de nuestros trabajadores. Por esto, ofrecer apoyo psicológico y físico a nuestros empleados, a través de sesiones de terapia online o presencial, por medio de citas de fisioterapia o con clases de meditación, no solo es una ganancia para el trabajador, sino también para la empresa.  

· Impulsar la cohesión de los equipos. Imaginemos un rompecabezas de 1.000 piezas. Necesitaremos todas las piezas y que estas encajen entre sí para poder completarlo, lo que nos llevará tiempo, esfuerzo y dedicación. Podemos extrapolar esta idea al referirnos a la cohesión de nuestros equipos. Será necesaria la integración de todos los integrantes para alcanzar una verdadera cohesión grupal. Sin la cohesión de todas las piezas, no seremos capaces de visualizar la imagen final. El trabajo en equipo y la buena interacción entre los empleados ayuda a crear un clima laboral positivo, lo cual mejorar el bienestar de los trabajadores y aumentar el sentimiento de pertenencia, compromiso y motivación hacia la empresa. Un buen trabajo en equipo también comprende que hay una delegación correcta de trasfondo. Delegar aporta un valor inmensurable al empleado, ya que se refuerza su autonomía y su autoconfianza, y a la empresa, puesto que ayuda a su descentralización, y por ende, a que sea más eficiente. La forma más acertada de promover la cohesión de nuestro equipo es a través de actividades sociales y recreativas fuera del horario laboral, como podrían ser una cena laboral, un outdoor de juegos amistosos entre colegas o una excursión grupal.

En resumen, estas medidas nos ayudarán a crear un entorno laboral saludable, en donde no se priorizará la ausencia de una enfermedad o malestar, sino que el principal objetivo será proporcionar el mejor bienestar posible a nuestro equipo. Después de todo, la buena salud mental de nuestros empleados es imprescindible para que puedan alcanzar los objetivos de a empresa. Priorizar el bienestar de los trabajadores no solo es lo correcto, es lo humano.

Si lo que quieres es seguir potenciando el bienestar emocional de tus empleados, nosotros te podemos ayudar.

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